Vampiro 7: Badica

Lo se, lo se, tardo milenios en actualizar mis historias n.nU pero tengo mis motivos, creanme (Moon lo sabe) asi que... de todos modos nadie me presiona para actualizar pronto xD okno bueno ya... aqui esta el siguiente cap y les adelanto que esta bella historia no tarda en terminar 

*+. ~~~~~ Badica ~~~~~~ .+*

El resto de la tarde nos la pasamos hablando de todo menos de lo importante, yo no quería hablar del tema y por lo que podía ver Angela tampoco, asi que yo no iba a romper la armonía que había entre nosotros con cosas que ninguno quería escuchar.

Pronto la noche se sirnio sobre nosotros, habíamos encendido la chimenea de la pequeña cabaña y estábamos sentados frente a ella, juntos y abrazados, Angela bostezo un par de veces

-creo que deberías ir a dormir-

Dije un poco divertido

-creo que tu deberías ir a dormir-

Dijo ella en respuesta

-jajaja, como si lo nesesitara-

-¿a que te refieres con eso?-

Rayos, se me había olvidado por completo que ella no recordaba nada, vamos Carlos piensa en una estúpida excusa

-bueno…es que yo no estoy cansado-

-si, se nota-

Dejo escapar una pequeña risita

-pero creo que te tomare la palabra y dormiré un poco, después de todo, quien sabe que pasara mañana-

Se levanto de mi lado, camino hacia la cama y se sento en ella

-¿estas seguro que no quieres dormir?-

Pregunto de nuevo mientras me estudiaba con la mirada

-si, completamente seguro-

Le dije mientras le dedicaba una pequeña sonrisa

-bueno, en todo caso no te voy a rogar-

Se recostó en la cama y se tapo con las viejas sabanas de esta

-buenas noches Carlos-

-descansa Angela-

Necesitaba que se quedara dormida, yo necesitaba alimentarme pero no podía hacerlo mientras ella estuviera despierta, espere sentado frente a la chimenea hasta escuchar que su respiración fuera lenta y constante, ya estaba en el mundo de los sueños, me levante de un salto y fui hasta la cama, hay estaba ella, dormida, inconsiente de las cosas que suceden a su alrededor, tan bella y tan frágil, me incline sobre ella y deposite un beso en su frente, después de eso salí de la cabaña, adentrándome en el bosque cada vez mas, necesitaba encontrar algo que comer, camine en el bosque por horas, sin éxito, resignado decidi volver a la cabaña, si me controlaba podría durar mas tiempo sin sangre, podía lograrlo, corri de regreso esperando que Angela todavía estuviera dormida, que no se diera cuenta de mi salida nocturna, pero nada me preparaba para lo que encontré a mi regreso.

Entre en la cabaña, tratando de ser silencioso, pero en cuanto abri la puerta lo vi, era Sebastian, sentado en la cama junto a Angela, ella estaba despierta y lloraba desconsoladamente, estaba seguro de que el le había hecho algo

-dejala tranquila-

Le grite a el mientras una furia incontrolable crecia en mi

-no te acerques-

Esta vez fue Angela la que me había gritado

Me quede ahí parado, a medio metro de la cama, con la sorpresa reflejada en todo mi ser, era Angela la que me había gritado que me alejara, mi odio comenzó a convertirse lentamente en dolor, un dolor incesante que me quemaba el corazón

-no quiero que te me acerques nunca jamás, ni a mi, ni a Alice, no quiero verte nunca, me escuchaste, NUNCA-

Me grito mientras se levanto de la cama

Yo retrocedi, sin saber que hacer o que decir, jamás hubiera esperado esto, ¿Qué mentira le habrá dicho ese tal Sebastian? Finalmente se me ocurrió algo que decir

-¿Qué sucede Angela?-

Era lo único que me había llegado a la cabeza

-¿Qué sucede? ¿quieres saber que sucede? Sucede que tu eres un maldito vampiro-

Con que era eso, ¿Cómo no me lo espere antes?

-dejame explicarte…-

-tu no tienes nada que explicar, nada que decir, pero yo si, no quiero volver a verte nunca, jamás-

Con paso decidido avanzo hasta la puerta y salió, dejándonos solos a mi y a Sebastian

-¿Qué mentira le has dicho ahora?-

-yo no he menido, solo conte la verdad a mi favor, ¿eso es malo?-

-te matare por eso-

Me abalanze sobre el, decidido a matarlo, a ponerle fin a su inútil existencia, pero el logro esquivarme, lo intente de nuevo, con el mismo resultado, varios intentos mas que acabaron en el mismo final

-te dije que te arrepentirías o no-

Me dijo con una sonrisa de suficiencia que le iba de oreja a oreja

-esto aun no termina-

Le dije mientras me ponía de pie

-te equivocas, esto termino hace ya mucho tiempo-

Y con esas ultimas palabras se fue, dejándome solo en el dolor y la ira

El resto de la noche me la pase planeando como iba a matar a Sebastian, estaba tan desesperado que incluso llegue a considerar mandarle una horda de vampiros asesinos, aunque el problema era que yo no tenia dicho ejercito de vampiro, como ese tuve muchos otros, fruto de la desesperación y el dolor, en ese momento llego a mi cabeza Angela, la forma en como me había gritado, en como me había mirado, en como me había dejado, como se había ido diciendo que no quería volver a verme nunca mas, un dolor punzante se abalanzo sobre mi pecho, me dolia perderla, me dolia dejar las cosas asi, me dolia que me hubiera dicho maldito vampiro, me dolia su adiós; me tire en la cama y mire el techo fijamente, ahora intentando pensar en como arreglar las cosas con Angela, pero ¿Cómo?, ¿Cómo iba yo a hablar con ella si no me quería cerca? ¿Cómo iba yo a contarle la verdad? ¿Cómo iba ella a creerme?; esto definitivamente no era bueno.

“¿Qué haras ahora?”

Me pregunto una voz interior

-no lo se-

Respondi al viento

“tal vez te haría bien dar un paseo”

-¿de que sirve un paseo en este momento?-

“sal y lo averiguaras”

Esta vez la voz no sono como la voz de mi conciencia, me sonaba familiar, me pregunte como esa voz podría ser la voz de mi conciencia ahora

“no soy tu conciencia bobo, ya deberías saberlo”

Con un salto me levante de la cama, sorprendido por que la voz en mi cabeza me sonaba tremendamente familiar, y por que definitivamente no era mi conciencia, y por que me había llamado bobo; mire a mi alrededor sin saber que hacer ahora

“ya te lo dije, sal de la cabaña y entra en el bosque”

Inseguro de saber si obedecer o no a la voz salí de la cabaña, el sol brillaba en lo alto del cielo, resplandeciente y majestuoso, rodee la cabaña hasta el bosque y me interne en el, mire en todas direcciones en busca de lo que aquella voz quería que yo viera, escuche un ruido a mi espalda pero reaccione demasiado tarde, algo me derribo, cai sobre mi espalda y ese alguien quedo encima de mi, me sentí indefenso y después una sonrisa se dibujo en mi rostro al ver quien era la causante de todo el alboroto.

Era Badica.

Badica era una vampiro, la mas joven que yo conocía, ella había sido transformada cuando solo tenia diez años, un grupo de vampiros habían irrumpido en su casa la noche de navidad, cuando toda la familia de ella había ido a celebrar las fiestas, esa noche los vampiros dieron muerte a toda la familia de Badica, exepto a ella, claro. Yo la había conocido hace mucho tiempo, cuando había entrado en la ciudad en la que vivía en aquel entonces, vivimos un tiempo juntos, yo le enseñe a ser “vegetariana” y a sobre llevar lo que ser un vampiro significaba, desde entonces no habíamos hecho grandes amigos.

Ella tenia una habilidad especial, asi como yo podía caminar a pleno rayo de sol ella  podía leer mentes pero también era capaz de comunicarse por el mismo método, debi imaginarme que era ella

-¿Qué estas haciendo aquí?-

Dije sorprendido, su visita me alegro tanto que casi olvide a Angela, casi

-tan solo quería verte de nuevo-

Dijo con su cantarina voz, se notaba que se había quedado en los diez años

-¿Cómo me encontraste?-

-tengo mis métodos-

Respondió mientras se señalaba la cabeza de un modo jugueton

Finalmente se hizo a un lado para que yo pudiera sentarme, en cuanto estuve recargado en un árbol se abalanzo sobre mi envolviendome en un abrazo, yo hize lo mismo, desde que la conoci ella era como mi hermana pequeña, alguien a quien debía proteger, a toda costa. Y que tal vez ahora me ayudara a recuperar al amor de mi vida.